En Internet y el mundo de la tecnología pocos proyectos tienen el encanto de iniciativas como el proyecto Loon de Google: la construcción de una red móvil de Internet utilizando globos aerostáticos que flotan grácilmente a unos 20 kilómetros de altitud. De momento está todo en fase de pruebas, pero el equipamiento técnico para hacerlo realidad ya existe y de hecho se ha utilizado en otros proyectos similares. Todo lo que falta es probarlo a gran escala y comprobar qué sucede en el día a día cuando tienes cientos o miles de estos globos flotando por ahí.